
Dicho esto y siguiendo con el tema estadístico, el orden de las cinco entradas más visitadas es:
3º El viaje de fin de curso, con el 4,7 % de visitas.
Os he puesto los enlaces por si no los habéis leído que no tengáis que buscar, que se que por no buscar no se ven las cosas.
Analizando todos estos datos he llegado a la conclusión de que muchos beticos y simpatizantes son lectores míos, que son amantes del deporte en general y les gusta viajar aunque ahora con la crisis solo sea en autobús urbano. A estos datos les añadiré que el tema bricomanía y el hacer chapucillas en casa también les atrae y que además son padres o se sienten como niños.




Y que decir de esa trilogía de las sombras de Grey tan conocida en el mundo femenino. Es una saga de las más vendidas y leídas de los últimos tiempos, preguntes a quien quieras sabrá de que estás hablando aunque no los haya leído (yo voy por el último de los libros y lo reconozco abiertamente). Entre ellas es como una enfermedad infecciosa, una lo compra lo devora en pocos días, después se lo cuenta a una amiga y le pasa el libro. Dicho esto, ¿porqué no reconocen que les gusta el sexo? y no acepto respuestas tan banales como la de... nos gusta hacer el amor, que estoy de acuerdo en que también es bonito.
Para los que no hayan leído estos libros, a grandes rasgos la historia va de una estudiante virgen (esto ya tiene mérito hoy en día), que conoce a un hipermegamillonetis jovencito que para más inri está que cruje, alto, guapo, rubio, cachas y encima con una tranca brutal (todo son observaciones de mi lectura), entre ellos hay atracción desde el primer momento. Todas las tías que aparecen en los libros babean por el... por todas partes. Hasta aquí todo casi normal ¿verdad?... pues resulta que el Sr. Grey es un amo dominante que quiere hacer con la chica toda clase de prácticas sexuales relacionadas con la sumisión. Las esposas, las fustas, las bolas chinas, las pinzas para pezones, los vibradores vaginales y anales etc, son cosas empleadas como la cosa más normal, aliñadas con azotes y demás lindezas, a las que va unido unas frases de lo más romántico, valga como ejemplo una sacada al azar "date la vuelta nena que te voy a follar duro"... ¿quien no se pone ñoño con algo así?
Eso si, he de reconocer que al leerlo a un tío le entra una envidia que te puede dar algo. Aparte de la descripción que hice del Grey, resulta que el tío es un fenómeno del manejo del preservativo, hay momentos que si te imaginas lo que vas leyendo te haces a la idea del protagonista pegandose con el asunto en la frente de la alegría que lleva encima, rasgando el envoltorio del condón lanzando el globito al aire y colocandolo como un artista de circo haciendo malabares, que me río de los mecánicos de Alonso en un pit-stop, eso si que es rapidez y precisión. Eso por no hablar del aguante y vitalidad que desborda el chaval, digo yo que la escritora para abreviar entre kiki y kiki se come parte de los días, porque parece que empalma, nunca mejor dicho, uno con otro.
Dicho esto queridas amigas, que esto va para vosotras, no seáis tan mojigatas con el asunto sexual ni tan ñoñas, que ya visto y leído todo esto, a mi no me la pegáis porque las estadísticas no engañan.
Salu2.